El roble rojo estadounidense es la especie dominante en los bosques de frondosas de los Estados Unidos. Su fibra es característica y la madera no es siempre de color rojo. El nombre proviene del color de la hoja en otoño. El roble rojo puede venderse como «septentrional», «meridional» y «apalache».
Quercus spp, principalmente Quercus rubra
roble rojo del norte, roble rojo del sur
Los robles rojos solo crecen de forma natural y casi exclusivamente en Norteamérica, aunque se plantan en otros lugares. Se distribuyen extensamente por la mayor parte del este de los Estados Unidos en bosques mixtos de frondosas. Los pies son muy altos. Hay muchas subespecies, todas clasificadas como roble rojo, que crecen de norte a sur; algunas en las montañas a gran altitud y otras en tierras bajas, lo que da lugar a características diferentes. Por lo tanto, los robles rojos presentan variaciones significativas en función del lugar de crecimiento, en particular entre los pies septentrionales de crecimiento lento y los meridionales, de crecimiento más rápido. Los robles rojos se consideran altamente sostenibles tanto para el consumo nacional como para exportar y, al ser el mayor grupo de especies, son más abundantes que los robles blancos.
Los datos del Análisis del Inventario Forestal (FIA) indican que el volumen de madera en pie de roble rojo de los Estados Unidos es de 2620 millones de m3, un 18% del volumen total de madera en pie de frondosas estadounidenses. El volumen de la madera de roble rojo de los Estados Unidos en crecimiento es de 60,6 millones de m3/año, mientras que el volumen de extracción es de 31,9 millones de m3/año. El volumen neto (después de la extracción) está aumentando 28,7 millones de m3 cada año. La tasa de crecimiento del roble rojo estadounidense supera o iguala a la de extracción en todos los estados, a excepción de Texas.
El roble rojo de los Estados Unidos está fácilmente disponible como madera aserrada y como chapa de madera, en una amplia gama de calidades y tamaños. Puede obtenerse madera aserrada más gruesa (10/4” y 12/4”) en volúmenes relativamente pequeños de proveedores especializados, pero en toda la industria de la madera de frondosas se produce de forma generalizada con grosores de 4/4” (25,4 mm) a 8/4” (52 mm). En el norte, la madera tiende a contener menos albura —a causa de la temporada de crecimiento más corta— que en el sur, donde la madera crece más rápido y presenta una fibra y una textura más bastas. El roble rojo se vende como «septentrional» o «meridional», pero esta clasificación puede ser una simplificación excesiva de las diferencias existentes según la ubicación de crecimiento.
Los robles rojos estadounidenses tienen muy buenas propiedades de resistencia general en relación con el peso. La madera es dura y pesada, con resistencia a la flexión y rigidez medias y alta resistencia a la compresión. Tiene una excelente aptitud para el curvado con vapor. Al ser dura y estable cuando está seca, y fácil de acabar y de teñir, es idónea para suelos y muebles.
Para obtener más información sobre las propiedades mecánicas del roble rojo, lea la publicación "Madera de frondosas estadounidenses para uso estructural".
La madera aserrada de roble rojo se mecaniza bien y tiene buenas propiedades para el clavado y el atornillado, aunque se recomienda hacer taladros previos. Se encola bien y puede teñirse y pulimentarse hasta alcanzar un acabado muy satisfactorio. Al ser poroso, el roble rojo absorbe todos los tratamientos. La madera se seca mejor lentamente para minimizar el deterioro, pero presenta una alta contracción, y, en condiciones de humedad, puede ser susceptible de moverse puesta en servicio.
La madera de duramen se clasifica como poco durable pero medianamente impregnable con protectores. Esto la convierte en adecuada para la modificación térmica.
Este grupo de especies gestionadas de manera sostenible y procedentes de los bosques naturales de Norteamérica, con excelentes credenciales ambientales, es una especie clave en muchos mercados de exportación. Sus principales usos son muebles, suelos, puertas, ebanistería fina, molduras y armarios de cocina. También se utiliza para determinadas aplicaciones en el sector de la construcción.